El Sueño de Esmeralda


ESMERALDA
Estaba sentada en una sala exterior del cielo,
llevaba puesta la bata que uso siempre
y observaba a dos ángeles desde cierta distancia.
Sal, como desde donde estás tú sentado a la esquina de la tienda.

Había un púlpito y una silla pequeña en el local,
hechos de una madera nunca vista en la tierra.
Las puertas eran de mármol, pero transparente.
Estaban escribiendo en un libro la fecha de tu nacimiento.

¿Te acuerdas de tu primera comunión en el asilo?.
Todos los niños iban vestidos de blanco y llevaban velas.
Cuando te encarcelaron me pediste una cinta
para señalar las páginas que escribías cada noche.

SALVADOR
Estoy cansado, mamá.

LOCUTORA DE LAS NOTICIAS
Su nombre era Salvador Agrón, pero le llamaban el Hombre de la Capa.
En los 50s cuando los adolescentes difíciles eran llamados
delincuentes juveniles, fue el jefe de una banda en La Cocina del Infierno,
en Manhattan, llamada Los Vampiros. El Hombre de la Capa asesinó
a dos jóvenes y cuando lo detuvo la policía se mofó de una manera
desafiante diciendo "No me importa si me achicharran. Que lo vea mi madre".
Salido de la cárcel vivió en una oscura tranquilidad en el Bronx.
Salvador Agrón murió ayer de un ataque al corazón. Hoy habría cumplido 43 años.

ESMERALDA
¿Te acuerdas que cuando fuimos al Santero
te predijo que sufrirías?. Tenía razón.

SAL
Creo en el poder de San Lázaro.
No estropees esta noche de verano de satén.
Ooh-Ooh-Ooh-Ooh.

ESMERALDA
Los dos ángeles eran muchachos y hablaban suavemente.
El mar y el sol se reflejaban en sus cabellos.
Llevaban una cadena que rompieron.
Despues la dejaron a mis piés y se fueron.



© Traducción/Translation:José María Escudero, 1999

 
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