Blessed are the meek for they shall inherit.
Blessed is the lamb whose blood flows.
Blessed are the sat upon,
Spat upon,
Ratted on,
O Lord, Why have you forsaken me?
I got no place to go,
I've walked around Soho for the last night or so.
Ah, but it doesn't matter, no.
Blessed is the land and the kingdom.
Blessed is the man whose soul belongs to.
Blessed are the meth drinkers,
Pot sellers,
Illusion dwellers.
O Lord, Why have you forsaken me?
My words trickle down, like a wound
That I have no intention to heal.
Blessed are the stained glass, window pane glass.
Blessed is the church service makes me nervous
Blessed are the penny rookers,
Cheap hookers,
Groovy lookers.
O Lord, Why have you forsaken me?
I have tended my own garden
Much too long.
Comentarios: Canción mucho más ácida, oscura y cargada de ironía que muchas otras de su repertorio, y en ella Paul Simon subvierte conscientemente las Bienaventuranzas bíblicas para reflexionar sobre la alienación, el abandono espiritual y la hipocresía social en la América urbana de mediados de los 60.
“Blessed” tiene una estructura casi beatnik, con un ritmo irregular y versos libres, más hablados que cantados. Musicalmente, es más agresiva y tensa que otras piezas del dúo. Muestra la influencia de Dylan, de los poetas de la generación beat, y de la creciente insatisfacción de los jóvenes de los 60 frente a las estructuras tradicionales. En conjunto, “Blessed” no ofrece respuestas: es una canción sobre sentirse desplazado, sobre buscar sentido en un mundo que parece haber perdido sus coordenadas espirituales. Es una pieza muy representativa del Paul Simon joven: introspectivo, cáustico, poético y profundamente sensible a la injusticia.